Allí en la plaza donde se alzaba la antigua iglesia de San Torcuato, otra víctima de nuestro acerbo cultural; allí donde unas termas romanas salieron a la luz hoy cubiertas por un imponente edificio precioso donde los haya (menos mal que las cubrieron, se imaginan saber que hay algo de valor en Calatayud, menudo incordio…), allí, imponente se yergue este maravilloso caserón con un reloj de sol y unas columnitas imitando la gloriosa arquitectura de Roma, a mi, como bilbilitano un poco crítico, hasta no me importa que se haya comido media calle porque lo que esta construcción luce es algo ¡tan digno!.Que usted quiere revivir las églogas en compañía de su amada vestida de pastora, pues nada, pásese por aquí, por el edificio ROMA, y recite a su ganadera unos bellos versos.
¡Oh pastora! ¿tú ves que bello
esta arquitectura que aquí se halla?
aquí el que contempla llora
y la mayor parte del pueblo calla..
Pues sin más nos despedimos, no sea que el azulete de sus muros me hagan confundirme con el cielo de la celtiberia, me retiraré a llorar de emoción.OH SALVE BÍLIBILIS