Alrededor de la iglesia jesuítica de san Juan el Real han surgido contrucciones actuales que quizá han restado una ambientación adecuada al entorno monumental en el que han sido construidos.
Si el antiguo edificio de correos se distinguía por lo feo de su catadura (por algo la tierra empezó a tragárselo) surgió este bloque no menos ecléctico y tan poco personal con el que se vienen adornando últimamente las calles bilbilitanas.
El antiguo Seminario de nobles (hoy juzgados) queda embutido entre un bloque de hormigón (que se pretendía moderno) y que alberga los servicios sociales municipales, un pegote de cemento con banderas y este edificio que hace un esquinazo con esas galerías metálicas tan poco personales a las que nos tienen acostumbrados en nuestra pequeña ciudad que poco a poco pierde personalidad en favor de el ahorro en originalidad y en tipismo.
Puntúen ustedes, les aseguro que hay peores…desde el portal a los balcones un calco de lo que vamos a ver en sucesivos episodios.